El hipospadias es una malformación congénita en la que la abertura del conducto urinario masculino (uretra) no se encuentra en la punta del pene. Cuando hay hipospadias, la abertura uretral puede estar ubicada en cualquier lugar a lo largo de la uretra, pero es más común que se encuentre a lo largo de la parte inferior del pene, cerca de la punta. Cuando el bebé se desarrolla en el útero, la uretra no alcanza su longitud completa. El prepucio tampoco se desarrolla completamente. Por eso, puede haber más prepucio en la parte superior del pene y nada de prepucio en la parte inferior. La punta del pene puede estar curvada hacia abajo.
El hipospadias es un trastorno que se presenta en aproximadamente 5 de 1,000 bebés varones. Algunos bebés varones que tienen otros problemas de salud, como testículos no descendidos o hernias inguinales, también pueden tener hipospadias. En casos muy raros, una niña puede tener hipospadias. La abertura de la uretra entra en la vagina.
El hipospadias se puede reparar mediante cirugía. Por lo general, la reparación quirúrgica se realiza cuando el bebé tiene entre 6 y 12 meses de vida. En este momento, el pene no crece mucho. El bebé no se debe circuncidar al nacer. Esto se debe a que puede ser necesario contar con prepucio adicional para la cirugía.