Cortar el panini y retirar un poco del pan del interior para que el sándwich quede más crujiente.
Colocar la mitad del queso en la base del pan. Colocar capas de carne, calabacín, tomate y cebolla. Cubrir con el resto del queso y la parte superior del pan.
Calentar una parrilla sandwichera. Rociar las placas de la parrilla ligeramente con aceite de oliva. Calentar el sándwich hasta que el queso se derrita y la carne esté caliente, aproximadamente de 3 a 5 minutos.