Precalentar el horno a 375°F. Cortar la parte superior de las cabezas de ajo y rociarlas con aceite. Poner los ajos y los jalapeños en una bandeja de horno rociada con aceite de oliva en aerosol para cocinar. Hornear entre 35 y 45 minutos.
Retirar del horno y dejar enfriar a temperatura ambiente. Exprimir los dientes de ajo de las cabezas y ponerlos en una licuadora o procesadora de alimentos.
Utilizar un cuchillo afilado para arrancar suavemente la piel desprendida de los jalapeños y desechar la piel. Añadir los jalapeños y todos los ingredientes restantes al ajo y licuar hasta que esté cremoso. Servir con pan tostado o galletas saladas o como salsa para verduras frescas.