La transición hacia el otoño y el invierno suele marcar el comienzo de la temporada de resfriados y de gripe. A medida que el clima se hace más frío y las reuniones navideñas en interiores son más frecuentes, por lo general vemos una afluencia de niños que acuden a la Sala de urgencias con síntomas del resfriado común, de la gripe, de la COVID-19, del virus respiratorio sincicial, el rinovirus y otras enfermedades respiratorias.
Entonces, ¿cómo puede proteger a su hijo de enfermarse con una enfermedad respiratoria? Y si su hijo se enferma, ¿cómo sabe si es hora de ir o no a la Sala de urgencias?
Si le preocupa que su hijo presente síntomas de una infección respiratoria, primero llame al médico de cabecera. Si cree que su hijo tiene una urgencia médica, llame al 9-1-1 o vaya a la sala de urgencias más cercana. Tenga en cuenta que el virus respiratorio sincicial, la gripe, la COVID y otras enfermedades respiratorias están causando un aumento en los tiempos de espera en la Sala de Urgencias. Obtenga más información sobre cómo prepararse para una visita a la Sala de urgencias >>
Cómo saber la diferencia entre un resfriado, la gripe, la COVID-19, el virus respiratorio sincicial y otras enfermedades
De octubre a marzo se suele denominar temporada de influenza, o gripe, porque por lo general vemos un aumento en los casos de gripe durante esta época. Los síntomas de la gripe pueden incluir, entre otros: tos, fiebre/escalofríos, dolores corporales y dolores de cabeza. A medida que la enfermedad avanza, se puede desarrollar congestión y secreción nasal. Los niños que tienen el resfriado común generalmente no reportan dolores corporales o dolores de cabeza o tienen fiebre alta, por lo que estos síntomas son una buena pista de que su hijo puede tener la gripe. Sin embargo, a menudo es complicado que los padres digan la diferencia entre la gripe y el COVID-19 debido a sus síntomas comunes.
El virus respiratorio sincicial puede parecer inicialmente «un resfriado», pero para los niños menores de 3 años, puede convertirse en una infección grave que puede causar dificultades para respirar. Los síntomas que pueden presentar son fiebre y tos, que puede convertirse en sibilancias, respiración rápida y superficial o fatigosa (a menudo llamada «respiración abdominal» porque el estómago sale y entra a medida que el cuerpo trabaja duro para obtener más aire).
Visite la página de internet de la Academia Estadounidense de Pediatría (American Academy of Pediatrics) para obtener más información sobre cómo diferenciar la COVID-19, la gripe, el virus respiratorio sincicial y un resfriado.
Cómo proteger contra la influenza (la gripe), el virus respiratorio sincicial y la COVID-19
Los virus respiratorios como la gripe, el virus respiratorio sincicial y el virus de la COVID-19 pueden transmitirse cuando una persona enferma transmite el virus a través de las gotitas que expulsa al estornudar, al toser o al hablar. El virus respiratorio sincicial también se puede propagar cuando una persona entra en contacto con superficies que una persona enferma ha tocado y luego se toca los ojos, la nariz o la boca. Estos son algunos consejos para evitar la transmisión de virus respiratorios:
- Asegúrese de que cada miembro de su familia reciba la vacuna antigripal anual.
- La Academia Estadounidense de Pediatría y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan que todos los niños de 6 meses en adelante reciban la vacuna contra la gripe.
- Recibir una vacuna contra la COVID-19 y refuerzo, si es elegible. A partir de junio de 2022, la vacuna contra la COVID-19 está autorizada para cualquier persona mayor de 6 meses en adelante. Obtenga más información sobre las vacunas contra la COVID-19 >>
- Quédese en casa si no se siente bien, especialmente si tiene fiebre o presenta síntomas de gripe u otro virus respiratorio, e intente aislarse lo más posible de otras personas en su hogar. Si debe salir, use mascarilla para evitar la propagación de gérmenes a otras personas.
- Lávese las manos con regularidad, especialmente antes y después de comer y después de ir al baño.
- Desinfecte frecuentemente las superficies que todos comparten en su hogar.
- Cúbrase la boca y la nariz cada vez que tosa o estornude.
- No comparta tazas, platos, juguetes ni otros artículos con alguien que tenga síntomas de una enfermedad respiratoria.
- Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca.
Este invierno, es importante estar atento para tomar precauciones como el distanciamiento social, usar mascarilla y lavarse las manos con frecuencia. Juntos, podemos mantener más sanos a nuestros hijos, a las familias y a las comunidades.