Trastornos por consumo de sustancias
El consumo de sustancias es una preocupación creciente entre los padres, sobre todo entre los padres de adolescentes. El consumo de sustancias controladas puede causar un daño significativo y duradero en cuerpos y cerebros en crecimiento. La Academia Estadounidense de Pediatría recomienda que los pediatras y otros proveedores de atención primaria presten atención a signos de consumo de sustancias a partir de los nueve años.
¿Qué son los trastornos por consumo de sustancias?
El consumo de sustancias, también conocido como toxicomanía, se da cuando una persona consume fármacos por ocio, placer o para enfrentar los factores de estrés de la vida. El consumo de drogas, incluso si no lleva al abuso o la adicción, es peligroso, especialmente para los niños y los adolescentes. Puede afectar la salud mental (agraviando enfermedades como la depresión o la ansiedad) y la salud física.
Mucha gente asocia la toxicomanía con drogas ilícitas, como la metanfetamina o la cocaína, pero la toxicomanía ocurre más comúnmente con drogas como el tabaco (como los cigarrillos), el alcohol y la marihuana. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, estas tres últimas son los tipos de sustancias más comunes, incluso en el consumo de sustancias por parte de niños y adolescentes.
Además, es importante entender que los medicamentos recetados también pueden ser el origen de los problemas de consumo de sustancias de una persona. La nicotina, una sustancia controlada, también es una amenaza en aumento para muchos niños y adolescentes, ya que se usa comúnmente en dispositivos para vapear. Sustancias controladas como esta pueden tener un impacto en el cerebro en desarrollo de los niños, pueden causar problemas de ánimo y de aprendizaje, además de ser un riesgo para los pulmones y el corazón. Los niños y adolescentes con un trastorno por consumo de sustancias también pueden incurrir en otros comportamientos de riesgo que pueden afectar su salud y bienestar general.
¿Cuáles son los síntomas del trastorno por consumo de sustancias?
Hay varios síntomas y señales a los que los padres y otras personas pueden prestar atención si les preocupa un problema por consumo de sustancias:
- Se aleja de los amigos o deja de realizar actividades que antes disfrutaba
- Sufre de depresión, ira o irritabilidad
- Tiene dificultades para dormir
- Tiene problemas de conducta en el hogar o en la escuela, que pueden dar lugar a medidas disciplinarias
- Tiene sustancias o parafernalia de sustancias
- Presenta cambios físicos (pérdida repentina de peso, ojos enrojecidos, o pupilas dilatadas o contraídas)
Tratamiento para los trastornos por consumo de sustancias
No hay una sola razón por la que alguien comienza a consumir sustancias, pero hay varios factores que pueden contribuir a aumentar el riesgo, entre ellos:
- Antecedentes familiares de consumo de sustancias
- Antecedentes familiares de abuso o abandono
- Cambios familiares o conflictos en el hogar
- Antecedentes familiares o personal de enfermedades mentales
- Falta de disciplina o disciplina excesivamente estricta en casa
- Presión social
Prevención de trastornos por consumo de sustancias
Aunque no hay una forma segura de evitar que un niño o adolescente desarrolle un trastorno por consumo de sustancias, hay muchas formas en las que usted, como padre, madre o adulto responsable, puede intervenir o ayudar a reducir el riesgo.
El proporcionar una estructura, una rutina y confianza en la vida de un niño puede ayudarlo a superar los altibajos y los retos que conlleva el crecimiento. El saber que cuentan con un adulto atento que está dispuesto a escuchar puede evitar que un niño o adolescente recurra a comportamientos de riesgo para obtener atención. Además, la educación sobre el consumo de sustancias, y los peligros del consumo de sustancias y la adicción son una parte importante de la prevención. Las escuelas, los profesionales de la salud y las organizaciones juveniles locales suelen tener recursos educativos disponibles de forma gratuita para niños y adolescentes.
Si sospecha que su hijo ha desarrollado o está desarrollando un trastorno por consumo de sustancias, es fundamental que busque tratamiento de la mano de un profesional de la salud licenciado de inmediato. La detección e intervención tempranas son clave para que el tratamiento tenga éxito. Cuanto más grave sea el trastorno por consumo de sustancias, más difícil será cambiar ese comportamiento.
El primer paso es conseguir una evaluación de un profesional de la salud licenciado. Ellos pueden determinar el origen y el alcance del trastorno por consumo de sustancias de un niño y trabajar con él y su familia para determinar el mejor tratamiento. Un plan de tratamiento puede incluir terapia individual o familiar, y medicación.